(Valencia 1973). Por distintas y variadas circunstancias, tuvo que dejar la escuela a edad temprana. La imaginación, la paciencia, y la capacidad de operar y aprender le fue privada por la necesidad de ser «hombre» y trabajar como tal de forma precoz. Su decisión de apartarse de las drogas y el alcohol, en un escenario de aceptación, le llegó a aislar y hacerle padecer una profundísima depresión de la que ha regresado, totalmente, al descubrir sus increíbles dotes creativas que, junto a su determinación y perseverancia, le han permitido crear una saga literaria que algunos expertos la equiparan a la de J.R.R. Tolkien.
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